2011-01-31

Moda gorila

TRAJEADOS COMO GORILAS

Del amor que en esta casa se siente por los gorilas como criaturas cinematográficas ya sabrán ustedes a poco que sean frecuentadores del Desván. Hoy que me he enterado de que es del Día Mundial del Traje de Gorila, esa noble conmemoración, les traigo para que repasen a su gusto algunas de las perlas del Cine Primate que han desfilado hasta ahora por aquí. Hala, a aprendérselo todo, que bien podrán presumir de friquis, que dicen ahora, entre sus conocidos.
Y una pregunta concurso: ¿A qué filme corresponde la foto de arriba? Está sacada en un descanso de rodaje; dentro del traje de gorila estaba, creo recordar, yo mismo...
AQUÍ se cuenta de este "White Gorilla"

AQUÍ todo sobre "Gorilla at large"

AQUÍ, todo sobre "El hijo de Tarzán"

AQUÍ noticia del serial "The Monster and the Ape"

AQUÍ reseña abuelitesca de "The hairy ape"
AQUÍ se cuenta de Karloff en "The Ape"

AQUÍ para saber de este asombroso "Hijo de Ingagi"
AQUÍ reseña desvanesca de "The Gorilla"

AQUÍ para saber de esta perla del bestialismo: " The Bride and the Beast"
AQUÍ todo sobre el Simio Hombre de "Dr. Renault´s secret"

2011-01-27

Un pulp de verdad

Desde las paredes del kiosco lanza el pulp su grito de colorines prometiendo emociones sin cuento...
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Estrenamos hoy cabecera en el Desván, explícita, sincera, radical: un totum revolotum donde Raffles se codea con el Doctor Loco, la Cerda y el Cerdito lo hacen con el obligado Lugosi, mientras Satanás, el gorila del serial Perils of Nyoka, alterna con la calavera del Conde Drácula.
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Nada más indicado para seguir reivindicando las raíces y obsesiones del Desván que recurrir al universo pulp, uno de nuestros predilectos. El caso es que habrá algunos entre ustedes, pienso, que confundidos por la verborrea tarantoide harán uso equívoco del término (del que tanto se ha abusado desde la Pulp Fiction aquella). Para que esto no suceda más, hoy les muestro una de esas publicaciones de cabo a rabo. Para que vean cómo se maquetaban, se concebían, eran recibidas por el comprador ávido de evasión.
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Escogida no al azar, sino por lo ejemplar de su resolución al estilo clásico americano, les traigo imágenes de un volumen de la colección Fantástica correspondiente a 1946, cuando la edad de oro del pulp empezaba su decadencia.
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Tras la hermosa cubierta, el índice, repleto de títulos poéticos pergeñados por un solo hombre, el polifacético Manuel Vallvé...
En la página siguiente, un bonito mapa mundi donde queda localizado el escenario de cada uno de los relatos, en un alarde de ingenuidad y cosmopolitismo...


Relatos de templarios a lo Amando de Ossorio avant la lettre, de crimen y remordimiento en lejanas tierras o de micos sobrenaturales encargados de hacer cumplir la voluntad de los muertos. Todos con apetitosas ilustraciones de Alex Coll, don Jaime Juez o el gran Darnís, el de El Jabato...------------------------------------
...Un poco de publicidad, donde quedan meridianamente expuestas las delicias que aguardan al comprador del siguiente número...

Goticismo y aventura, dos polos recurrentes siempre tan agradecidos...

...Y para los recalcitrantes, dejo aquí un relato completo de venganzas de ultratumba, para que puedan catar el estilo y jaez de los textos... piquen encima y podrán leerlo, no se quejarán...



...Más relatos, claro, de muertos en vida en el Londres hasta ayer bombardeado, o espectros fantasmagóricos de toda clase y condición...
...Otro poco de publicidad, que hay que potenciar la serie hermana que se avecina, a ver si el público traga con su mayor precio, un duro nada menos...-------------------------------------- Y al concluir la lectura, la contracubierta, dando noticia de otros universos a nuestra disposición, poblados por héroes, damas y masas de carne impulsadas por el odio y la venganza...

¿Quién puede resistirse a semejantes tentaciones, divertimentos impecables, gloriosas intrascendencias...?
(SE ME OLVIDABA:PUEDEN VER OTRAS PORTADAS DE ESTA COLOSAL SERIE QUE PUSE HACE YA TIEMPO AQUÍ...)

2011-01-24

Parsifal

PARSIFAL
Director: Daniel Mangrané (y Carlos Serrano de Osma). Con Gustavo Rojo, Ludmila Tcherina, Félix de Pomés, Alfonso Estela. España, 1951

Hay contados filmes que desde su misma concepción aspiren a la condición de rarezas. Éste del que hoy les hablo es español, de 1951, época y lugar poco dados a extravagancias o singularidades; se sitúa sin embargo voluntariamente en un territorio único en el que sólo cabe él mismo. Vean que comienzo: en medio de las ruinas de la Tercera Guerra Mundial dos soldados encuentran un librote sobre el atril de una derruida iglesia. En él se cuenta la historia de Parsifal y su búsqueda del Santo Grial, la copa en la que bebió Cristo, acaecida en tierras hispánicas allá por el siglo V.

Esta primera parte, en la que se da noticia del nacimiento prodigioso de Parsifal -no sería digno héroe si su llegada al mundo no estuviese rodeada de misterio- y su crianza entre los bosques, resulta semejante a filmes grandes como Los nibelungos de Lang o La corona de hierro (1941), el clásico del cine fascista que facturase Alessandro Blasetti. Ya saben: buena fotografía, nula intención de naturalismo, combates cuidadosamente coreografiados, encuadres de aire pictórico, vestuarios recargados, estéticas añejas.

Abundan, en este caso, las hordas cuasi troglodíticas vestidas de pieles y con grandes barbas, opuestas en su salvajismo a cuanto representa la Orden Custodia del Grial, caballeros mitad monje, mitad soldado que habitan entre las cumbres del sagrado Montserrat. Y las sibilas, los augurios, las venganzas... entre un paisaje de regustos metafísicos donde la niebla, los inmensos cielos y la sobrehumana proporción de las montañas delatan su pertenencia a Otro Mundo. El de la Tradición, con mayúsculas, para bien y para mal netamente europeo, cristiano y muy español.

Toda la lucha entre el malvado Klingsor, caudillo bárbaro de mirada lugosiana, y Parsifal, el conquistador del Grial, mantiene un tono arrebatado, como de Luz contra Tinieblas, misticismo barato de andar por casa. Y es que no en vano la historia está basada en Ricardo Wagner, tal vez el más hondamente kitsch de los artistas. Solemnidad y trascendencia la hay para dar y vender, un poco demasiada incluso para quienes no tenemos empacho en devorar cuantos excesos estéticos se pongan ante nuestros ojos y lo hacemos a gusto, además.

Oropeles, artificios y una religiosidad radical y muy rancia acaban por empachar y se acercan, peligrosos, a lo llanamente cursi. Mas hay también en Parsifal toneladas de magia, una historia inusual, algunas imágenes difíciles de olvidar -el Jardín de los Pecados Capitales, por ejemplo-, una estética que tan pronto emborracha como empalaga y un tono tan inusual en el cine español -y en cualquier otro, qué diantres- que termina por convertirla en puro delirio. Acercamiento al fantástico tan frailuno como prodigioso: en todo caso, único...

2011-01-19

Cerdos como nosotros

LA CERDA Y EL CERDITO
Hoy me siento pródigo, tal vez por no visitar este rincón con la frecuencia que deseara, y he decidido instruirles con un relato entero, sin recortes ni selecciones como suele ser costumbre en esta casa. De la mano del genial ilustrador Luis Palao, conocido de ustedes, va ahí íntegramente La cerda y el cerdito, narración popular en versión años treinta.
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Sombría fábula sobre la vanidad, el disimulo, la ingratitud, la aceptación social... que aúna el urdir folletinesco y su estética necesariamente super realista, con la carnalidad irreal que corresponde a su calidad de cuento.
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Lean y deleítense con esta pieza maestra, llena de expresivos animales vestidos que no dejan de producir cierta inquietud, pródiga en mordiscos y gruñidos, con un final atroz. Oscura, amarga y rebosante de humor negro... justo como me gusta a mí.
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