2012-10-01
Manolo Prieto en los Otros Mundos
NOVELAS Y CUENTOS FANTÁSTICOS
A tales alturas ya conocerán ustedes la longeva colección Novelas y Cuentos, de las que tantas veces les he hablado (pinchen AQUÍ), difusora como pocas de la literatura a precios al alcance de todos los bolsillos. Letra apretada, doble o triple columna, papel poroso amarillento como pocos y excelsas cubiertas a cargo, las más de las veces, del inmortal Manolo Prieto. Como todas las que traigo al Desván hoy, realizadas entre 1940 y 1950 y poco.
De todo ilustró Prieto; nuestra preferencia nos lleva una vez más al Fantástico, género ampliamente visitado por el artista. En Marte estuvo varias veces, casi siempre de la mano de Edgar Rice Burroughs. Como en estas dos novelas, representantes de sus dos estilos pictóricos: el sabio realismo y el genio de geométricas síntesis.
Es Atlántida relato futurista en el que el continente perdido reflota en nuestros días, o mejor, en los de Hans Dominick, escritor alemán de entreguerras. Mucho éxito tuvieron entonces sus utopías, disitopías y ucronías.
No se dejen engañar por la gigantesca araña, ni por el nombre que firma este Mundo monstruoso. Debo a Galderich y Leblansky saber que tras el inexistente M. Laguna se oculta, sin saberlo ni él mismo, el estadounidense Murray Leinster, de cuya novela The mad planet (1921) es traducción esta, publicada hacia 1939-40.
Hay que ver cuanto gustaba en la posguerra española don Edgar Wallace. Amante de goticismos y heterodoxias, frisan muchas de sus novelas los turbios ambientes del terror. Como este inmejorable gorila perplejo ante una guillotina a punto de ponerse en marcha. Imagen extraña y poderosa como pocas...
Wallace hizo escuela, como puede apreciarse por este Misterio de High Eldersham, en el que los habitantes de un pacífico pueblo inglés celebran en la noche ritos precristianos y cultos cuasi satánicos. Encapuchados, como debe ser, frente al todopoderoso Macho Cabrío.
Plantas carnívoras acechan en La isla de los desaparecidos, celosas guardianas de uno de tantos tesoros como ocultan los archipélagos del pulp. Así dejó constancia el desconocido J. Hulick, escritor agradable y poco original de quien nada he podido averiguar...
Un Leroux con sabios locos, profecías de muerte y toneladas de humor negro y finísima ironía. Cualquiera que haya leído antes al autor de El fantasma de la Ópera sabe que con él la diversión inteligente y la extravagancia más sincera están siempre aseguradas. Un título este Sillón trágico recientemente reeditado que nadie debiera perderse.
Francés como Leroux es Pierre Loti, el autor de esta Novela de un niño de portada prodigiosa: el mundo abalanzándose sobre el indefenso Yo que somos todos nosotros, siempre temerosos de ser engullidos.
Para terminar, algunos clásicos españoles. Sean gigantes, demonios y monstruos de nuestro imaginario medieval; falsos fantasmas del siempre realista don Pío, o socarronerías tristes de las que tan bien bordaba don Wenceslao, todas cuentan con un valor añadido. El que un artista como Prieto les otorga, pródigo y generoso desde los soportes más modestos...
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23 comentarios:
Lo de Edgar Wallace es digno de estudio. En los 20 y 30 era el rey en todo el mundo, y luego ha tenido esta extrañísima fama póstuma con las deliciosas pelis alemanas de los 60. Y ahora es como si no hubiese existido...
Tendremos que promover un revival Wallace, Abuelo.
Si no lo he hecho ya no sé a qué espero, señor Rancio...
Algunos dibujos tienen su aquél, pero otros... en otros la verdad es que se quedó descansando, vamos.
Sin ánimo de ofender, yo lo tildaría de "dibujante irregular".
Por cierto, no conocía yo esa novela de Baroja. El viejo cascarrabias tenía una prosa muy de andar por casa, pero se atrevía con todo. Claro que, al final, todo sonaba como a prosa de mesa camilla. No sé si ha leído usted sus "Memorias de un hombre de acción", don Abuelito, pero suerte que eran las de un hombre de acción, si llegan a ser las de un sedentario...
Es una pena el olvido de Edgar Wallace. No obstante hay una reciente serie alemana del 2002 que no me atrae nada, no va con esl espíritu original. Mi novela favorita suya es "La puerta de las siete cerraduras".
Otro autor olvidado es Dennis Wheatley, del que me gustaría se reeditara algo en español. En Gran Bretaña apareció hace poco un nuevo volument con tres novelas. Se intenta relanzarlo.
Alberto.
Don AJC, habla de las mismas memorias de un hombre de acción que he leido yo? las de Eugenio de Aviraneta peleando en la guerrilla del cura Merino, cabalgando con el Empecinado contra los absolutistas, conociendo en Grecia a Lord Byron y acabando la guerra carlista con sus intrigas? qué más se necesita para hablar de acción? que luche contra los marcianos?
Como están las novelas de Wheatley, Alberto? yo solo conozco las adaptaciones de la Hammer, la estupenda La novia del diablo y la horrenda/hilarante que transcurre en el mar de los sargazos...
¿Qué se puede decir de Manolo Prieto? Cualquier halago será poco. Ya sabe usted el aprecio que le tenemos en la "Galeria d'imatges".
Al César lo que es del César y la información de M. Laguna a Carles Hernando. La mezcla de cubertas de la serie de Novelas y Cuentos permite comparar la obra realizada por Manolo Priueto y los otros ilustradores.
Me encantan todas las portadas pero para sillón malvado el Fangsthul que tienen en una tienda de antiguedades de Barcelona, cuando alguien se sienta en ese sillón los dos brazos se cierran sobre el cuerpo y te impiden escapar. Un sillón-trampa por el módico precio de 50.000 euros.
La portada de la Atlantida es maravillosa. Saludos. Borgo.
Como siempre fantasticas portadas, muchas las tengo, pero algunas de las desconocidas me han dejado totalmente descolocado, muy buena selección.
Sí, señor C. Rancio, las novelas a que me refiero son las de Eugenio Aviraneta (que existió realmente y era antepasado de Baroja, de ahí que decidiera convertirse en su "biógrafo". Y mucho me temo que aunque hubiesen intervenido los mismísimos habitantes de Barsoom, las aventuras de Aviraneta hubiesen tenido cierta rémora, una falta de chispa. Siempre, claro, según mi humilde entender. Baroja era un buen retratista de tipos y costumbres, un escritor de situaciones, pero lo suyo no era la aventura. Por eso es por lo que lo recordamos por "La busca", "El árbol de la ciencia" o "La casa de Aitzgorri" y no por sus "Memorias de un hombre de acción". Si su obra se hubiese limitado a éstas últimas, hoy se le recordaría tan poco como a Emilio Carrere o Gregorio Martínez Sierra. En cambio, sólo por su "Trilogía de la vida", ya tendría asegurado un huequecito en la memoria de todos.
Don AJC, no puedo en esta ocasión sino disentir de su parecer: si Prieto se muestra irregular, según mi modo de ver, es porque oscila entre lo adecuado y lo brillante, abundando más veces esto último... Tenga en cuenta que facturaba portadas sin cesr, una a la semana al menos, aparte de sus otros trabajos relacionados con la publicidad... Así pues, la cantidad de soluciones gráficas que aporta es inmensa, lo mismo que su evolución hacia la síntesis perfecta, en busca de la máxima expresividad con las menos líneas...
El libro de Baroja es una recopilación de relatos breves, de los que el de mayor extensión es el de Los duendes del castillo.
Don Alberto, coinidimos una vez más: a mí es también La puerta de las siete cerraduras el libro de Wallace que más me gusta, será por esa atmósfera como de filme de miedo de la Universal, con laboratorios y criaturas semi humanas... De Wheatley algo hay en castellano, al menos una edición de Bruguera de "Fuerzas ocultas" y otra más moderna de "El talismán de Set". Verdaderamente sería deseable que apereciese algo más, dos novelas en décadas son muy pocas...
Señor Rancio, sólo puedo decirle que recientemente encontré la edición de Bruguera de "Fuerzas oscuras" (que no ocultas, como he dicho antes), un tocho de 670 páginas que cuenta las aventuras de un espía inglés en la segunda guerra mundial... Hay algo de satanismo y magia, algún ceremonial aberrante; mucha pero que mucha aventura, con el protagonista infiltrado entre los nazis; una última parte en la que el hombre se cuela en el mismísimo bunker de Hitler, que aparece como personaje en la novela... en fin, un cóctel 100% pulp, la mar de entretenido. La verdad es que lo leí, creo recordar en dos días, pese a su extensión, y eso porque es de los que enganchan a la primera... Hágase con él cuando pueda, pues le gustará. Está en Libro Amigo de Bruguera, en edición de 1967...Hala, a buscar...
Señor Hernando, Galderich: bien sabida es nuestra predilección por Prieto; lo de Leinster y Laguna lo coregiré pronto, que es de justicia... y es verdad que mejor se aprecia la obra de Prieto en Novelas y Cuentos cuando se compara con la del resto de portadistas de la colección, por más que Serny sea también un buen ilustrador, su inventiva no alcanza la de don Manolo ni de lejos... nunca tres colores dieron más de sí.
Borgo, no sabe cuánto me gustaría sentarme en ese sillón encantado que en Barcelona tienen... De esta clase de artilugios no conozco más que uno cuyo avatar se relata en un "Cuento Marujita": "El sillón del duendecillo", que cerraba los brazos en torno al desdeichado que osaba sentarse en él y lo transportaba rápidamente a Otro Mundo corriendo sobre sus cuatro patas. Ahora, que lo de los ciencuanta mil euros le resta encanto a la cosa, la verdad...
Señor rancio, corrigiendo mi anterior comentario, le comunico que hay en castellano bastantes obras de Wheatley traducidas, si bien la mayoría son novela histórica editada por Caralt a principios de los sesenta... En Iberlibro o en todocoleccion.net las encontará sin pegas, algunas a muy buen precio...
C. Rancio: Las novelas de Wheatney que he leído me gustan casi todas. Te recomiendo mucho -igual que el Abuelito- "Fuerzas oscuras", que fue la primera que leí de él (y la única en castellano)en la vieja edición de Bruguera (¡con el macho cabrío con la svastica y las velas en la portada! . Una de mis favoritas (en inglés) es "They found Atlantis". A mí me gustó mucho también la película "La novia del diablo"; creo que es la mejor de la Hammer.
Alberto.
Pienso que es igual de importante el hecho de que con una portada llamativa y una edición barata (creo,5 pts en 1950) se acercan a todo el mundo obras de Gastón Leroux,Edgar Wallace o Pío Baroja que tal vez de otra forma u otro formato mucha gente no hubiera leído.
En este sentido, la labor de colecciones como esta, con correctas traducciones y versiones íntegras al alcance de todos los bolsillos fue impagable, Angeluco...
Alberto, Abuelo, gracias, ya tengo un Wheatley en camino. Por cierto, Abuelo, que constato a través de ese facebook del demonio que su la obra de Prieto, y los ejemplos que lleva poniendo en concreto, está siendo aclamada allende los Pirineos...
Facebook del demonio, bien lo dice usted, pues como él es tentador y aborrecible... sólo mi avanzada edad y acendrado eremitismo me impide de momento caer en ese pecado...
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