A semejante energúmeno lo vi hace un rato zampándose un tebeo del Capitán Trueno, condimentado por Ambrós y Mora, cosecha 1958, en el programa de El Mon de Xicutel. Mal gusto no tiene, no. Bien bueno debe de estar.
2 comentarios:
Anónimo
dijo...
dios mío, qué hambre me está entrando de ver a este buen hombre zampándose felizmente ese tebeo incunable. Se cabó el jamón de bellota, vivan los legajos rancios!!
Pues si en vez de zamparse ese tebeo incunable lo vendiese, mas rentabilidad le sacaría, y podría comprarse un buen bocata jamón. A fin de cuentas una u otra cosa se convierten en caca, pero al menos lo segundo no le produce dolor de tripa por exceso de tinta.
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dios mío, qué hambre me está entrando de ver a este buen hombre zampándose felizmente ese tebeo incunable. Se cabó el jamón de bellota, vivan los legajos rancios!!
Pues si en vez de zamparse ese tebeo incunable lo vendiese, mas rentabilidad le sacaría, y podría comprarse un buen bocata jamón. A fin de cuentas una u otra cosa se convierten en caca, pero al menos lo segundo no le produce dolor de tripa por exceso de tinta.
Manuelescu
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