LAS NIÑAS REPUBLICANAS
¡Ay, qué sofoquina, nietales, que casi me da un telele! ¡Que yo de estas cosas ya ni me acordaba, leñes!
Hala, abro una de los cientos de cajas polvorientas que me rodean ¿y qué es lo que veo? Nada menos que un montón de cochinerías gustosas de hace unos añitos, poco antes de la Guerra, cuando en la República se podían halagar públicamente las cosas de la entrepierna, para escarnio de curitas y fastidio de obispos.
Unas fotillos clandestinas, sacadas en un piso de vaya usted a saber qué calle de Madrid, con mocitas enmascaradas divirtiéndose la mar; una acuarela artística que se llama ¡Toda! ; una novelita de título prometedor, Memorias de una otoñal, con dibujo de Penagos; un ejemplar de la colección La novela inocente, repleta de damiselas republicanas robustas como debe ser haciéndose cositas, de dibujante anónimo... Qué sé yo!! Ay...
Ea, veánlas un rato, que yo ya he sudado bastante. A entretenerse que hoy va la deriva por lo sicalíptico. A gozar, a gozar, que ya llegaréis a viejos!!!
6 comentarios:
:O polvos lesbicos de antes de la guerra civil... estoy en pañales. Deliciosas estampas.
por el amor de dios, abuelito... ¡¡Qué fotos más descocadas y picaruelas que me ha colgado ud
en su blog!!
Pues qué viva el michelín y el despelote, sapristi!!
Los dibujos incluso parecen hechos por un joven Robert Crumb, lo que hay que ver.
Estupendas imágenes de bellezas rotundas. Cuelgue más si tiene, abuelito.
Un saludote.
Se hará lo que se pueda, profesor. habrá que seguir investigando en el cajón de las cochinaditas.
¡Vaya sorpresa!.
¡No esperaba ver ésto en el blog del abuelito!.
Publicar un comentario