Director: Lucien Hubbard. Con Lionel Barrymore, Jane Daly, Lloyd Hugues, Montagu Love. USA, 1929
Por fin han pasado por Canal Desván esta Isla Misteriosa de 1929, que llevaba ya treinta años y ochenta y tres días aguardando paciente para verla. La espera ha merecido la pena, porque se trata de un filme con elevado sentido de la maravilla, que anuncia en sus modos las aventuras fantásticas de Harryhausen o las incursiones que en los setenta realizase Doug McClure en los mundos perdidos de Edgar Rice Burroughs.
Encima se cuenta con un presupuesto de gran producción, actores de primera con el colosal Lionel Barrymore a la cabeza, efectos especiales pintorescos y esmerados y una puesta en escena con la perfección que corresponde a su artífice, el director artístico Cedric Gibbons, garantía de un acabado impecable y personal.
Mezcla precisa de aventura y ciencia ficción, la película nada tiene que ver con la novela de Julio Verne, por más que así lo proclame. Narra la historia de una aristócrata millonario que vive en su isla consagrado a explorar los fondos marinos. No es de extrañar tal manía, porque entre inmersión e inmersión ha ido hallando fragmentos del esqueleto acorazado de un hombre submarino y enano, señal de que una civilización subacuática se localiza en las cercanías.
La trama se cruza con una invasión de cosacos que saquean la isla mientras el submarino hace su primer viaje. Una bella muchacha y un audaz ingeniero proletario, más un par de traiciones y arrebatos, dan lugar al melodrama con el que discurre agradable el tiempo hasta que llega el momento de descender a las profundidades.
Un desfile de prodigios aguarda a los sufridos expedicionarios. El Pueblo del Abismo es una raza de pigmeos palmípedos y acorazados, sin nariz y de ojos redondos, habitantes de enormes cavernas submarinas. Tras atacar en multitud al submarino con un ariete, son espantados por la irrupción de un dinosaurio, lagarto con apliques de goma que camina bajo el mar como si tal cosa. Un pulpo gigante rematará la faena.
Aunque el argumento es deslavazado, como a trompicones, el ritmo no decae nunca y estéticamente La isla misteriosa es un verdadero festín. La fascinación por la máquina, desplegada en planos de émbolos, válvulas, manivelas; el mundo sumergido con sus cuevas de cartón; los paisajes pintados; las cuidadosas maquetas; las metálicas escafandras con que deambulan por un territorio encantado; los extraños habitantes de lo insondable... Todo cuanto pueda hacer estremecer nuestras agradecidas carnes aparece sin tacha en este título fundamental del fantástico silente más cercano al pulp.
13 comentarios:
Uff, qué maravilla de imagenes que nos das. No sé porqué pero me parece que una vez, hace ya algunos años, Leblansky me pasó un DVD con otra fantástica versión de la misma historia pero realizada por un Checo en los años 40 o 50. A ver que dice Leblansky porque los fondos si mal no lo recuerdo, cosas de la edad, se realizaron con grabados del s. XIX. Otra maravilla visual.
por dios, que buena pinta tiene esta versión viejuna!!
qué trajes y qué razas palmímepedas más bizarras!
Pero que maravilla!
¿No se tratará, señor Galderich, de "Una invención diabólica", el grandioso homenaje que Karel Zeman consagró al mundo ficcional de Julio Verne? Está resuelta con grabados estilo Gustavo Doré, y cuanta una historia de submarinos, islas misteriosas y prodigios decimonónicos. Aunque no sea tan antigua como dice usted, es altísimamente recomendable, y encima está editada en castellano en impecable versión. Puede usted comprobarlo en www.trackmedia. com, sección "Maestros de la animación".
Menuda pintaza Abuelito!! Está en la mula??
Está, y además yo la tengo en lanzamiento... para intentar evitar que les tarde en bajar los 83 días que me costó a mí! La mantendré así bastante tiempo... aunque si quiere le envío una copia, escríbame a abuelitogum@hotmail.com y lo vemos allí...
Anónimo.
Exacto, esta película era la que me mostró Leblansky. ¡Otra joya del cine!
Uno de los mejores carteles que he visto. Yo también recomiendo al genial Karel Zeman. "Una invención diabólica" es su película más conocida pero también me gusto mucho su "Barón de Munchausen". Borgo.
Sorprende el uso que hizo la metro de un título y un autor con los que la película nada tiene que ver. Quizá existiera algún tipo de acuerdo... En todo caso me interesa muchísimo esta Isla misteriosa que nos propone. La atmósfera que sugieren las fotografías atrae como un imán. Coincido con Borgo en destacar el cartel. Espléndido.
Altés, escríbame a mi correo particular, y verá la forma en que su Abuelito puede hacerle un regalo de reyes...
Hace unas semanas metí en mi blog entradas sobre esta versión de "La Isla Misteriosa" (http://sherlockholmes.lacoctelera.net/post/2009/11/22/el-conde-andr-dakkar-y-profundos-isla-misteriosa-192), y también de la adaptación de "Ante la bandera" que hizo Karel Zeman(http://sherlockholmes.lacoctelera.net/post/2009/11/01/karel-zeman-ante-bandera-jules-verne). Qué gusto da ver que a todos nos gustan los mismos disparates.
Alberto López Aroca
La verdad es que su blogo, que desconocía, es una cosa seria, muy digna de verse, don Alberto... lleno de los disparates, que dice usted, que tanto nos gustan...
Es que para estos menesteres hay que ser personas serias y cabales. O si no, ¿que clase de tarados entrarían al trapo de Fantômas, el Tanque Humano, Sexton Blake, el Cola Cao, Juana de Arco, el Profesor Hasley y el Gran Cthulhu? Para esto, mi muy estimado abuelito, hay estar muy cuerdo.
Vaya si no.
Y por cierto; usted sí que está haciendo un gran trabajo de recuperación y difusión. Para ser felices, sólo necesitamos un palo con una cuerda, y visitar su bitácora. Amén.
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