2009-12-17

Un grimorio de bolsillo

EL LIBRO NEGRO
Hoy les traigo este alegre Grimorio de bolsillo que me he encontrado curioseando por los estantes del Desván; totalmente olvidado lo tenía, y así me ha ido.

Estas navidades voy a dedicarme al ocultismo, a ver si con estos remedios que aquí me proponen consigo ya de una salir de pobre. Les aconsejo, a poco que les divierta la estética mágica y los secretos indescifrables-e incomprensibles-, que hagan lo mismo que yo. Para ello tienen antes que obtener un ejemplar de este libro sabio, editado en Barcelona en 1849.

Un compendio de fórmulas que conducen directamente a la felicidad, no cabe duda.


-------------------------------------------------------------- Tras descifrar los principales secretos de esta ciencia inane y compleja, comienza la parte más interesante y práctica del Manual, las Recetas Mágicas, capaces de obrar cambios en la naturaleza de las cosas mediante la intervención de nuestra voluntad. Y hasta de jorobar a nuestros enemigos imbuyéndoles pesadillas, mira qué bien...

Como ven, les adjunto algunas de orden práctico cuyo primerísimo interés radica en su eficacia comprobada. Indaguen, si tienen alguno de estos males, en el curtidor más cercano a su domicilio, a ver si tiene pellejos de león, mono o asno. Quién sabe si él no será también un adepto. O fabriquen zumo de adormidera, que si no para espantar moscas, algún otro uso sabrán encontrarle.

Y si en estos tiempos inciertos se deciden por dedicarse a los negocios, no dejen de capturar antes una rana verde. Es tan fundamental, o más, que obtener el capital necesario.

Estas vacaciones, señores, follen como toros. Y no precupen si no pueden encontrar alguno de los ingredientes necesarios. Nos advierte el autor de que dado que conseguir cocodrilos en nuestro país no es tarea fácil, Cleopatra también da por bueno para este sortilegio el semen de varios perros, basándose en la facilidad de los canes para salir bien librados del ataque de los saurios. Así que ya no hay excusas, nietucos.
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Una entretenida actividad para estos días de asueto que, a quien más, a quien menos, nos aguardan: la confección de bonitos y sorprendentes Talismanes Mágicos. Lúzcanlos en sus reuniones familiares y ya no habrá quien les chiste jamás.

No puede renunciarse a una buena dosis de publicidad, cuando se hace en interés de las vidas de los lectores, claramente mejoradas por su adquirida facultad de adivinación del porvenir... Si hasta Napoleón usaba El Libro de los Destinos, cómo no va a funcionar... mañana mismo voy a la librería de Saurí...

13 comentarios:

Galderich dijo...

Lástima que la libreria Saurí está cerrada sinó nos encontrábamos allí comprando un ejemplar de este ejemplar libro!

Alberto López Aroca dijo...

Yo probé hace unos años lo de la piel del león, pero con león dentro y vivo. Fue un desastre, y sigo padeciendo las almorranas. ¡Ay!

El Abuelito dijo...

Ay, don ASlberto, con el león vivo no vale... Que ya sabe usted que el cumplimiento estricto del ritual es exigido en estas artes ocultas...

vincenzo insano dijo...

..en aquellos veranos, cuando las acémilas convivían con lo humano y la bosta ornaba las calles sin asfalto, la mosca florecía en su esplendor...era entonces cuando mi madre me fregaba con vinagre, para alejarlas...asemejaba yo un borracho del baratillo y, créame, las mozas mas fogosas, aquellas que valían la pena, eran atraídas...no era acaso demoníaco?...

El Abuelito dijo...

Mosca y demonio siempre han andado cerca, señor Insano... Yo probaría con el zumo de adormideras, a ver qué tal...

Sap dijo...

¡Por el chápiro verde, Abuelito! Ríase Ud. de la kriptonita y hasta de las pastillas del Chapulín Colorado... ¡donde esté un buen testículo de macho cabrío que se quite todo! (lo que no especifica el manual es si hay que arrancárselo al bicho en vivo). ¿Y qué me dice del mono? Parece talmente el modelo del célebre anisado.
¡Ay! Vago afán poseer este volumen y emparejarlo con el de San Cipriano.

angelpito injurioso dijo...

Asustado me tiene,agüelito,desde luego que ese autor hacia de todo en su cama,menos dormir,porque con tanta fauna peletera,a lo mejor llegaba hasta el techo.Lo dicho,¡pieles en la seguridad social,ya!

El Abuelito dijo...

¡Pellejos de mono, para poder j**** bien a los malvados!

Luis Miguez dijo...

Muy prácticos consejos. ¿Quién no tiene zumo de adormidera en casa, a fín de cuentas?

Lazoworks dijo...

¡Que gran hallazgo Abuelito! Jajaja!
Precisamente me han salido un par de almorranas y... ¡vaya! Mire usted por donde por aquí tengo un león la mar de bonito.
Que grandes tesoros esconde en su desván!!

Almorrana Man dijo...

Extraído de La Wikipedia 3D el siglo XXIII: "El Léon, animal que se extinguió en el siglo XXI por culpa de un blog de internet que proclamó que sentarse sobre su piel curaba las almorranas."

Caviargirl dijo...

Maravilloso libro... Me veo tragando ranas y haciendo preparados de grana de lampazo durante una buena temporada ^_^

Tira17 dijo...

joder que chaquetas mentales mas grandes se hechaban los hechizeros de la edad media...

algunos hechizos ciertos y otros mas falsos que la p*** ma***